Hasta el año 2010, la segunda economía mundial más importante era Japón. En el 2010 China ascendió de lugar, y ahora su economía es la segunda de mayor importancia global. Estiman que en diez años podría ser la primera economía del mundo, teniendo en cuenta su actual crecimiento. Este notable progreso nace de la libertad de empresa, y de haber promocionado el ingreso a su país de las grandes empresas transnacionales, las cuales han llevado allí enormes inversiones, modernas tecnologías y nuevos conocimientos.